Novak Djokovic, tras el triunfo ante Carlos Alcaraz en Australia: "Si perdía ese segundo set no sé si hubiera seguido jugando"

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Extenuado. Casi sin aire luego de más de tres horas de altísimo tenis, pero con una sonrisa que le invadía el rostro, Novak Djokovic contó sus sensaciones tras el triunfo ante Carlos Alcaraz en cuatro sets que lo depositó en la final del Abierto de Australia, el primer Grand Slam de la temporada. El partido estuvo marcado por una excursión del serbio a los vestuarios en el primer set -el marcador estaba 4-4- para ser atendido por los médicos. Y el séptimo preclasificado del torneo respondió: "Como todavía estoy en el torneo no quiero revelar demasiado de lo que pasó (risas). Pero sí, la medicación empezó a hacer efecto y los médicos ayudaron. Me tomé una segunda dosis (aunque suene mal), pero... si perdía ese segundo set no sé si hubiera seguido jugando. Pero me sentí cada vez mejor, pude jugar algunos games muy buenos y terminar ese segundo set".

Sin dar demasiados datos sobre la medicación que le prescribieron, Djokovic se refirió a cómo encaró el resto del partido: "Entonces vi que Carlos estaba un poco dubitativo desde el fondo de la cancha y aproveché mis chances. Me empecé a sentir mejor, a mover mejor, No me molestó ni me condicionó hacia el final del partido. Cuando la medicación deje de hacer su efecto veré la realidad... mañana a la mañana. Ahora sólo quiero disfrutar del momento y celebrar esta victoria".

Ante la pregunta de Jim Courier -ex tenista, devenido periodista en el campo de juego, sobre cómo había hecho para ganar el encuentro, Djokovic apeló a su habitual sentido del humor: "¡Con dos piernas y dos brazos, creo... o con una pierna y media", bromeó. Los hinchas que colmaron el Rod Laver Arena rieron ante la humorada de Djokovic. El serbio continuó: "Quiero dejar todo mi respeto y admiración para Carlos. Y todo lo que ha conseguido durante su carrera. Es una gran persona: el número uno más joven de nuestro deporte, ganador de cuatro Grand Slams. ¡Que gane muchos, aunque no tantos!". Hubo más risas. Y más Djokovic: "Jugué un gran partido y sólo desearía que esta hubiera sido la final. No sé si Zverev está despierto. Es la 1 de la mañana y no sé si está viendo esto. Seguro su equipo lo está... este fue uno de los partidos más épicos que jugué en esta cancha".

En un momento de la entrevista al pie del court, Djokovic se excusó por no entender la pregunta de Courier. "Escuché tu pregunta, pero me sorprende que mis hijos estén acá. Los amo. Gracias por apoyarme. ¡Pero es la 1 de la mañana. ¿Cuándo van a dormir?", les preguntó Djokovic, tenista multicampeón pero, sobre todo, padre a tiempo completo. En su box festejaban Stefan y Tara, sus dos hijos.

El contraste con su última (no) entrevista

El domingo, luego de vencer al checo Jiri Lehecka por los octavos de final del torneo, Djokovic había tomado el micrófono y no había respondido preguntas, enojado por la actitud de un periodista de Channel 9 de Australia que había criticado a los serbios. Djokovic tomó su bolso. En un lado del court, aguardaba Jim Courier, el exnúmero 1 del mundo y notero de Channel 9, la emisora oficial del Australian Open, para la habitual entrevista post partido. Pero, para sorpresa de todos, incluido el propio Courier, Nole tomó el micrófono, dio las gracias, dijo "nos vemos en la próxima ronda", y se dirigió directamente a los vestuarios. La perplejidad de la mayoría les ganó a los escasos abucheos en el Rod Laver Arena. El ahora notero estadounidense explicó casi de inmediato su visión: "Quizá sepamos más en la conferencia de prensa, pero él simplemente no tenía ganas de hablar. No tenía idea de que eso iba a pasar, pero los jugadores no tienen obligación de hacer la entrevista en la cancha. Es una ocasión para que hablen con la gente en la pista y con los seguidores del mundo, pero el jugador puede optar por no participar".

La explicación llegó en la cuenta de X del serbio: "Gracias a todos por el apoyo. Fue un gran partido contra Lehecka y se viene un gran partido contra Carlos (Alcaraz). Pero quiero dedicar un momento a reflexionar sobre lo que pasó en la cancha y la razón por la que no hice una entrevista que es algo común después de los partidos. Sólo quiero aclararles a todos lo que pasó, y la razón por la que elegí no hacerlo es porque hace unos días un famoso periodista de la transmisión principal hizo comentarios ofensivos hacia mí y mis seguidores de Serbia. Esperaba que se disculpara en público, lo que aún no hizo, como tampoco lo ha hecho Channel 9. Esa es la única razón por la que no hice la entrevista. Por supuesto, no me dejó una gran sensación y sé que fue algo bastante incómodo en la cancha. Jim Courier fue el que salió a la cancha con un tremendo respeto, siempre me encanta hablar con él y sé que mucha gente quería escucharme, así que me disculpo con todos los que estaban en el estadio y en la televisión también. Pero esa es la razón por la que se hace algo, así que dejo esto en las manos de Channel 9 para que lo manejen como crean conveniente, y espero que esa situación cambie para el próximo partido".

Djokovic no mencionó al periodista involucrado por esos comentarios. Pero pronto quedó claro que la referencia era hacia Tony Jones, que en plena transmisión hace un par de días disparó que Novak "está acabado". Detrás de Jones había una multitud de seguidores que gritaban y cantaban en apoyo de Djokovic, y Jones aprovechó para canturrear que "Novak está sobrevalorado, Novak es un fracasado". Claramente, le asiste la razón el exnúmero 1 del mundo sobre los comentarios despectivos, en una actitud insólita del presentador de la transmisión oficial, que acaso intentó ensayar una broma totalmente fuera de lugar.

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