Polémica en Italia: el bisnieto de Benito Mussolini anotó un gol y el festejo de los hinchas encendió fuertes reacciones
Ayer a las 06:38 PM
La Serie B de Italia tuvo un momento polémico este domingo en uno de sus partidos. Societa Sportiva Juve Stabia derrotó por 1 a 0 a Cesena, en un duelo por la fecha 18 de la segunda división y el autor del único tanto fue Romano Floriani Mussolini, que es bisnieto del dictador fascista Benito Mussolini. A raíz de ese parentesco, la situación incómoda se vivió tras la celebración de su tanto.
Medios italianos mencionan que Romano, hijo de Mauro Floriani y de la expolítica Alessandra Mussolini, es un gran jugador. Tiene 21 años y se desempeña como lateral o volante por la derecha en el club Juve Stabia, de Castellammare di Stabia, un municipio de la provincia de Nápoles. Este domingo, su equipo ganó con un tanto de cabeza marcado por el joven y luego de haber anotado su primer gol en 18 partidos jugados en ese equipo, llegó la celebración.
El jugador ensayó un gesto con el dedo índice en la boca cerrada, en una clara señal de pedir silencio. Pero una de las cámaras apuntó a una de las tribunas, y mientras la voz del estadio mencionaba de manera repetida y con mucha fuerza su nombre de pila, el público comenzó a responder gritando el apellido Mussolini mientras realizaba el saludo romano, que consiste en extender el brazo derecho de forma recta, con la palma de la mano hacia abajo, y puede estar paralelo al suelo o formando un ángulo hacia arriba. Un elemento muy característico del fascismo, proclamado en el año 1922 precisamente por su líder, Benito Mussolini, el bisabuelo de Romano. Lo curioso es que los seguidores de Juve Stabia eran más conocidos por estar orientados en política hacia la izquierda.
Prima o poi doveva accadere pic.twitter.com/3adCu4Vpoo
— La Ragione Di Stato (@ragionedistato) December 22, 2024
El medio italiano Gazzetta dello Sport contó que el partido de este domingo tuvo la presencia de su madre Alessandra, quien es nieta de Benito, además de actriz, cantante, modelo y exdiputada del parlamento europeo por Italia central entre 2014 y 2019, y perdió un gorro de lana verde durante el festejo, aunque lo encontraron minutos más tarde.
"Mi bisabuelo Benito fue una figura muy importante para Italia, pero estamos en 2024 y el mundo ha cambiado. Siempre habrá algunos prejuicios, pero mi trabajo no tiene nada que ver y no me pesa ", contó entonces el joven jugador. "Estoy a favor de los desafíos: si tengo que cerrar la boca a quienes tienen prejuicios sobre mi apellido, lo haré", amplió el propio Romano Floriani Mussolini.
La historia futbolística de Romano Floriani Mussolini, que nació el 27 de enero de 2003 en la capital italiana, comenzó en las formativas de AC Roma, pero en 2016 quedó libre con 13 años y se cruzó de vereda, a Lazio. En 2018 fue cedido a Vigor Perconti, un club amateur. Cuando regresó al equipo blanquiceleste tuvo su camino en las divisiones inferiores atravesando las categorías sub 17, sub 18 y sub 19.
El 24 de octubre de 2021, Floriani Mussolini fue convocado por primera vez con el primer equipo de Lazio, en un partido de la Serie A contra Hellas Verona. Allí estuvo en el banco de suplentes y no tuvo su debut, ya que no fue utilizado. Por este motivo, se ganó la atención del mundo, por jugar para el club que tiene a su hinchada más fuerte, denominada los Irriducibili, un grupo relacionado con el neofascismo. En una entrevista con el medio italiano Gazzetta dello Sport declaró que no tiene interés en la política y que decidió tener los apellidos de sus dos progenitores.
Luego de no contar con minutos en el primer equipo de Lazio, el joven fue enviado a préstamo a Pescara, equipo de la Serie C, en la temporada 2022-2023. Tras regresar de esa cesión, fue prestado a Juve Stabia, equipo en el que se desempeña actualmente.
Con este triunfo Juve Stabia alcanzó la tercera victoria en fila en la Serie B de Italia y se ubica en la cuarta posición con 28 unidades, en la lucha por ascender a la Serie A. Sassuolo lidera con comodidad, con 43 puntos y lo siguen Spezia y Pisa, ambos con 37.
