Tomás Cubelli: la vuelta a Belgrano, la final del Top 12 y esa situación nunca definida en los Pumas

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Un corte en la cabeza, rastro de batalla de un guerrero que se involucró en cada acción del juego, se comprometió en defensa y mostró su jerarquía para afrontar esta clase de encuentros. A los 35 años Tomás Cubelli volvió al club de sus amores tras una extensa carrera profesional, y ahora disfruta como un chico que está haciendo sus primeras armas en el plantel superior. "Tengo mucha emoción porque esto se vive en familia y en el club donde me crié. Estoy disfrutando mucho. Fue un año muy bueno para el club y no iba a dejar de serlo por perder hoy", expresó el medio-scrum de Belgrano en diálogo para LA NACION, luego del 28-27 sobre Newman en la primera semifinal del Top 12 de URBA, en la cancha de CASI.

Como ningún otro jugador, Cubelli recibió el cariño de todo el club. Los chicos lo atosigaron en busca de autógrafos y él aceptó todos los pedidos. Los grandes le requirieron fotos y muchos abrazos. Su Papá, Alejandro, "Pichino", un histórico del club, también apareció emocionado cuando se fundió en un abrazo con sus dos hijos. El otro, Francisco, ex capitán de la primera del club, estaba radiante de felicidad.

Cubelli, que regresó en el segundo tramo del torneo luego de una temporada en Miami Sharks, jugó 65 minutos en un alto nivel en el triunfo de este sábado, con experiencia para conducir, sus kicks y entendimiento de los distintos momentos del partido. Volvió a jugar esta instancia después de 13 años. "Desde 2011 no vivía esto, que era en La Plata en su momento. Después tuve la suerte de representar a Pampas y a los seleccionados de la UAR. Perseguí mi sueño de jugar en los Pumas, pero las cosas, políticamente, no iban de la mano. Todavía no sé si van de la mano...", señaló con un dejo de angustia. "En su momento, el sueño de jugar en los Pumas parecía no ir de la mano con lo que la Unión pretendía de un chico que tenía esa ambición. Eso me dolió", agregó, luego del éxito frente a Newman. "Por eso lo hoy fue una emoción triple; fue mucho el tiempo de espera. Éste es un fin de semana que va a quedar grabado para siempre. Mañana voy a bajar la emoción, porque viene una final", se conmovió.

Belgrano, que se clasificó en el cuarto puesto para los playoffs gracias a la victoria del propio Newman sobre CASI, esta vez fue el verdugo del Cardenal, en un partido muy cambiante, marcado por los estados de ánimo de ambos equipos. El líder de la tabla general tuvo el tiro del final con un penal de Gonzalo Gutiérrez Taboada, pero su envío se fue por un costado. "Estos partidos no tienen mucha explicación. El deporte es así. Me pongo en el lugar de Newman... Es un equipazo. Nos propusimos llevarlo al límite porque es un gran equipo, lo mostró durante todo el año", elogió Cubelli. Y tuvo más halagos y empatía: "Se dio así. Me pongo en el lugar de Scooby Gutiérrez Taboada, que, por lo que veo de URBA, es el mejor jugador de los últimos 10 años. Y un partido de rugby no pasa por una sola jugada. Dura 80 minutos. La idea nuestra era estar presentes, tirar todo y poner a Newman al límite".

Belgrano luchó y fue oportuno para lastimar. Dos tries provinieron de intercepciones, y el otro, por un error en una recepción aérea. "Hoy pasaba por estar presente en la cancha, levantar la mano y pelear por todas las pelotas hasta el final. Y lo hicimos. Eso me hace estar muy orgulloso de mi club", indicó el medio-scrum, que salió reemplazado a 15 minutos del final por el marplatense Ignacio Marino.

Compacto de Belgrano 28 vs. Newman 27

Tomás Cubelli es un referente de la historia reciente de los Pumas, por sus pergaminos y sus más de 90 caps. Con Felipe Contepomi en una tribuna este sábado, el número 9 admitió que su tiempo en el seleccionado puede haber terminado. En el ciclo nuevo, fue convocado en 2024 para el enfrentamiento con Australia en Santa Fe, pero una lesión muscular le impidió competir por el puesto. "De los Pumas yo hablo como jugador, hincha, fanático y alguien que realmente ama la camiseta. Ojalá no me necesiten; eso es lo que siento. Si me necesitan, uno siempre va a estar, pero ojalá no me necesiten y que jueguen bien los que estén. Soy el hincha número 1″.

Abrazado con su mamá, también visiblemente emocionada, le prometió que va a estar con ella este domingo, cuando se midan SIC y Alumni en la segunda semifinal y surja el último rival de Belgrano por el cetro de URBA. "Voy a disfrutar el Día de la Madre, disfrutar en familia. El partido de mañana va a estar en un montón de plataformas, va a haber tiempo para analizarlo. Que gane el mejor. Y voy a descansar las patas", sonrió. Después de la charla, Cubelli siguió dando autógrafos a los chicos que sueñan estar en su lugar el día de mañana.

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