No se vio: la reacción de Marcelo Gallardo al segundo gol de Rosario Central y al empate final de River
03/30/2025 12:58 PM
Al Millonario se le escapó sobre el final la victoria ante el Canalla y las cámaras de televisión captaron los gestos de disgusto del Muñeco.
Si bien no había hecho un gran partido, River merecía la victoria ante Rosario Central. Después de ponerse 2-1, tuvo chances para liquidarlo pero falló y sobre el final el Canalla lo empató. Así reaccionó Marcelo Gallardo al gol rival y al resultado final.
Como en todos los partidos del Millonario, el Muñeco es seguido de cerca por las cámaras de televisión. Casi como una marca personal. Así se pudo apreciar un detalle que en el momento pasó desapercibido, y que quedó opacado por las posteriores de declaraciones del DT en conferencia de prensa: el gesto de Gallardo.
Luego del tanto de Santiago López, mirada seria al frente, mordida de lengua como aguantando la bronca, risa incrédula y por último un movimiento de un lado al otro con la cabeza, no pudiendo creer el partido que se le escapaba a su equipo.
Se jugaron alrededor de 10 minutos entre el empate canalla y el final del partido, pero no daba la sensación de que River iba a encontrar un gol agónico victorioso. Ya en los segundos finales, Gallardo miraba en silencio, resignado. Cuando Falcón Pérez decretó el fin con el silbato, el DT se dio media vuelta y en silencio se fue al vestuario. Esta vez no saludó a los jugadores en el campo, como suele hacer.
El lamento de Gallardo por el partido que se le escapó a River
"No podemos terminar de concretar las buenas intenciones que tenemos. Hoy era un partido ante un muy buen rival para plasmar esas buenas intenciones. Lo pudimos hacer por momentos. Más allá del gol tempranero de Central nos repusimos y tuvimos momentos de buenas intenciones. Jugar en campo rival, recuperar la pelota y atacar, lo que intentamos plasmar para jugar de determinada manera", dijo el Muñeco en conferencia de prensa.
Y agregó: "La sensación es que el final del partido queda empañando por el empate final, por el gol demasiado fácil que nos hacen y casi lo perdemos. Eso empaña las buenas intenciones que tuvo el equipo. Para terminar de redondear, necesitábamos en ese 2-1 hacer el tercer gol que nos diera tranquilidad". "Nos queda un sabor amargo pero bueno, tenemos que seguir intentándolo. Las buenas intenciones están, hay que completarlas", cerró el DT.
