Por qué hinchadas rivales se unen en Argentina en defensa de los jubilados
Ayer a las 21:03
Un jubilado de 85 años camina con dificultad rumbo al Congreso. Viste una camiseta con los colores patrios de Argentina, sostiene su bastón y un cartel de cartulina en el que escribió: "DNU 179/ 2025, FUERA", en referencia al Decreto de Necesidad y Urgencia que la semana pasada emitió el gobierno del presidente Javier Milei que trata de un nuevo préstamo del Fondo Monetario Internacional (FMI), sin dar detalles de montos. Una de las consignas que mantienen los adultos mayores, junto al pedido de mejoras en las jubilaciones y prestaciones de salud.
Le cuesta hablar y mantiene los ojos cerrados, por las lágrimas. Minutos antes recibió una descarga de gas pimienta, que policías han lanzado para dispersar a las multitudes, en las marchas que ya son un clásico de los miércoles en la Ciudad de Buenos Aires.
Lo escoltan un fotoperiodista y otro manifestante. A medida que se aleja de la Policía y se acerca al tumulto de gente, hinchas de clubes de fútbol con distintas camisetas, jóvenes y otros jubilados le abren el paso mientras se suman a un aplauso colectivo para este señor que sigue reclamando sus derechos, a pesar de los enfrentamientos con policías.
La imagen es inusual: banderas de distintos clubes argentinos ―muchos de ellos rivales― ondean en medio de otras tantas de protesta. Hinchas y fanáticos de fútbol se encuentran lejos de las canchas para acompañar a los adultos mayores que sostienen un pedido al gobierno: mejoras en su calidad de vida.
Los jubilados fueron el sector más golpeado por la "motosierra" de Milei, como se refiere a sus políticas contra el gasto público. Desde que asumió en el gobierno, perdieron parte de su poder adquisitivo por la inflación, el acceso a descuentos en medicamentos y viven el fin de la moratoria previsional.
En febrero, la jubilación mínima más el bono ―que se mantiene congelado desde marzo de 2024― asciende al equivalente a unos US$ 285, al tipo de cambio paralelo. Según el INDEC, en Argentina la Canasta básica total para tres personas es de unos US$ 685,79.
Además, desde diciembre, el Programa de Asistencia Médica Integral (PAMI) ―el instituto de seguridad social estatal de los jubilados― modificó las condiciones para acceder a medicamentos gratuitos. Así, no podrían acceder a su medicina aquellos jubilados o pensionados que cobren más de un haber mínimo y medio, tengan cobertura de medicina prepaga y/o sean propietarios de más de un inmueble, de un auto de menos de 10 años y/o bienes de lujo, entre otros. Además, incluyeron un trámite online ―antes no requerido― para quienes necesiten acceder a los descuentos.
Por eso, desde mediados de 2024, los jubilados decidieron salir a marchar todos los miércoles hacia el Congreso. Algo como lo que pasaba en la década de 1990, en pleno gobierno de Carlos Menem, cuando los adultos mayores también reclamaban todas las semanas por un aumento en sus haberes y mejoras en las prestaciones de salud.
A medida que las protestas de los miércoles avanzaron, se pudieron ver imágenes de jubilados descompensados o agredidos por algunos agentes de seguridad que custodian el Congreso.
En una de las últimas convocatorias, se viralizó la imagen de un jubilado, Carlos Dawlowfki, vistiendo la camiseta del club Chacarita y explicando por qué marchaba: "Estoy acá para luchar por todos mis compañeros con los remedios, con un sueldo digno, una jubilación que nos permita vivir en paz. Después de haber aportado toda una vida. Esto así no podemos seguir. Espero que el pueblo argentino tome conciencia de lo que nos está ocurriendo". Cuando lo vieron, los hinchas de ese club de fútbol iniciaron una campaña para acompañarlos. Primero, se llenó de camisetas rojas y negras y cánticos de cancha. Luego, los fanáticos autoconvocados extendieron la invitación a otros clubes y así se empezó a gestar la marcha del último miércoles.
Desde distintas agrupaciones de hinchas, se publicaron convocatorias para defender a los jubilados. Una de las frases que llamó la atención fue aquella pronunciada por el ya fallecido Diego Armando Maradona en una de las históricas marchas en los 90, en la que el astro del fútbol argentino le dijo a la prensa: "Estoy a muerte con los jubilados. Hay que ser muy cag*n para no defender a los jubilados".
Al conocerse la gran magnitud de la convocatoria de este miércoles, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, compartió un comunicado en su cuenta de X en el que instaba "a todos los participantes a expresarse de manera pacífica y dentro del marco de la legalidad". Después de los disturbios, Bullrich dijo a CNN que se encontraban reconstruyendo los hechos.
A la convocatoria iniciada por hinchas se sumaron, luego, algunas centrales obreras. En las inmediaciones se vivieron momentos de tensión e incidentes que terminaron con al menos 124 personas detenidas y al menos un herido de gravedad, el fotoperiodista Pablo Grillo, que aún continúa internado en estado crítico, según la Policía de la Ciudad de Buenos Aires.
Tras las investigaciones realizadas luego de los enfrentamientos, la Justicia ordenó la liberación de 114 detenidos durante la protesta.
Esa misma noche, las calles porteñas volvieron a llenarse. Los hinchas y los jubilados ya habían sido desalojados del Congreso, pero de a poco se volvieron a escuchar los golpes de las cacerolas. Vecinos de todos los barrios se autoconvocaron para demostrarles a Carlos y a los demás jubilados que no están solos.
The-CNN-Wire
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