Abelardo se arrepiente de renovar con el Sporting en 2016: "Me equivoqué, no estaba preparado y mentalmente estaba destrozado"
Hoy a las 05:40 AM
De la mano del 'Pitu' Abelardo el Real Sporting logró una de las mayores gestas del fútbol español en los últimos años. El conocido como 'Sporting de los Guajes' que esquivó la desaparición del club con un ascenso y una permanencia agónicas entre 2015 y 2016 antes de descender en 2017.
El técnico gijonés comenzó aquella temporada en el banquillo, aunque ahora se arrepiente de haberlo hecho. Así lo ha declarado en el podcast 'El fútbol NO es así' de Rafa Alkorta. "Me equivoqué y no tuve que haber seguido después de aquellos dos primeros años. Mentalmente estaba destrozado y me ofrecen renovar y digo que sí. Si coges a un equipo tienes que estar mentalizado al 200%. No estaba preparado para seguir en el Sporting y me equivoqué", declara.
Aún así, no cree que la mala dinámica del equipo fuera porque no estuviera a tope. "Eso no significa que por eso fuéramos mal, porque empezamos bien y las cosas luego no fueron bien. Decidí marcharme yo, el presi me dijo de seguir, pero dije que tenía que irme porque los jugadores no estaban con mi misma sintonía", explica sobre su dimisión en febrero del 2017.
Los impagos y la presión de dirigir al equipo de sus amores en una situación tan complicada hicieron mella en el 'Pitu'. "Para mí fue un año muy duro el del ascenso eh, la plantilla estuvo cinco meses sin cobrar. Cuerpo técnico y jugadores nos unimos como nunca en el Sporting e hicimos una grandísima temporada. Tengo fotos de ese año y engordé la tira. En el año de Primera División estuve más delgado que nunca. No comía y luego comía por ansiedad. Aquellos dos años me quemaron mucho, pero con mucha alegría", explica.
Su regreso al Sporting, con más corazón que cabeza
Abelardo también se ha explayado sobre su regreso al Real Sporting en el año 2022 con la única intención de salvar al equipo del descenso a Primera Federación.
"Volví con más corazón que cabeza. Le quedaban cuatro partidos y estaba con una dinámica muy muy mala, para descender a Primera Federación. Me llamaron el presidente y Joaquín Alonso y no te voy a decir que me metieron presión, pero me suplicaron que cogiese al equipo. No tenía nada que ganar, porque el que salía en la foto si el equipo desciende era yo. En el penúltimo partido, contra el Fuenlabrada, los jugadores jugaban peor que horrible y a mí me dolía el pecho de la presión. Es el partido que peor lo he pasado en mi vida. Ese sufrimiento fue horrible", concluye.