19/04/2025 12:26
Borja Iglesias firmó el mejor partido de su carrera en Primera División para amargar al Barça, pero no fue suficiente (4-3). El hat-trick del delantero gallego disparó al Celta de Vigo con un 1-3 que sembró el pánico en Montjuic con LaLiga en juego, pero la gran reacción del Barça, con goles de Dani Olmo y Raphinha en tres minutos (del 64 al 67), provocó que el conjunto de Hansi Flick creyera en el triunfo.
Los gallegos pudieron ganar el partido en los últimos minutos con un cabezazo de Mingueza que se fue fuera. El jugador recibió un manotazo de Szczesny tras rematar y los árbitros no vieron penalti residual. Sí que vieron un penalti de Yoel Lago a Olmo en el 97 hizo que Del Cerro Grande llamara a Melero López al VAR y el colegiado dio la pena máxima. Raphinha transformó en el descuento y dejó los tres puntos en casa.
Los azulgranas empezaron muy fuertes, como viene siendo habitual en esta Liga. Sin Lamine Yamal, pero con Ferran Torres en la izquierda y Raphinha en la derecha, el líder de LaLiga generó peligro desde el principio. Los gallegos pretendían robar arriba y llegar en pocos pases a la portería de Szczesny, pero los catalanes sorteaban la presión con facilidad cuando sus centrocampistas recibían y se libraban de sus marcas individuales con conducciones y regates.
Fermín López se inventó la primera ocasión clara, cuando penetró por banda el sistema defensivo visitante y puso un centro envenenado que Lewandowski mandó fuera. El polaco propinó un codazo en la cara de Yoel Lago que se saldó sin amarilla. El Barça siguió atacando e Iñigo Martínez rozó el gol con un cabezazo peligroso. El gol local parecía cuestión de tiempo.
El Celta de Vigo tuvo mucha personalidadEn el minuto 12, el central vasco filtró una pelota precisa a la espalda de Ilaix Moriba para Ferran Torres, el valenciano condujo, se sacudió de encima a Marcos Alonso y sacó una latigazo cruzado que Guaita no pudo atajar. Sin embargo, el gol culé encontraría la réplica celeste con celeridad.
El propio Marcos Alonso cazó una pelota muerta en su campo, filtró un pase a la espalda de Gerard Martín y Pablo Durán realizó un centro entre Cubarsí y Szczesnyal que el polaco, en un grave fallo, no llegaría. Borja Iglesias empujó la pelota al fondo de la red sin oposición y colocó el 1-1 en Montjuic en el minuto 15. El tanto del ariete gallego daría mucha confianza al Celta, que se atrevía más con la pelota, superaba la presión culé y generaba ocasiones manifiestas.
En el minuto 22, otra vez Pablo Durán encontró la espalda de Gerard Martín y Borja Iglesias se quedó a un paradón de Szczesny de lograr un doblete. La acción fue calcada al primer gol celeste en Barcelona. El atrevimiento del conjunto de Giráldez abrió entonces las puertas al contragolpe del Barça, pero Fermín estuvo demasiado lento para filtrar el balón adecuado en el momento clave y Raphinha disparó centrado.
Gerard Martín fue un flan en defensaLos gallegos, camaleónicos, también demostraron que sabían aguantar al Barça en un bloque bajo compacto cuando el partido así lo requería. Con Borja Iglesias como punta de lanza en la descarga, los extremos celestes eran dos balas. Los azulgranas volvían a agobiar a los visitantes con su característica presión pospérdida, aunque no atinaban en el último tercio del campo, donde Pedri quiso coger protagonismo.
En una llegada suya a la frontal, el canario fue derribado y provocó una falta muy peligrosa que Raphinha disparó fuera. Los gallegos se estiraron al contragolpe, donde Borja Iglesias gozó de otra buena oportunidad que Szczesny abortó. La espalda de Gerard Martín era una autopista. Los locales contestaron de inmediato en una buena recuperación de Raphinha que Lewandowski envió por encima del travesaño. El Celta tendría la mejor ocasión antes del descanso, cuando Moriba derribó a Cubarsí y los gallegos gozaron de dos disparos a bocajarro que Szczesny detuvo.
El recital de Borja IglesiasEl segundo tiempo empezó con un cambio en el Celta: dentro Mingueza y fuera Losada. El Barça salió con los mismos hombres al campo, aunque Lamine Yamal se ejercitó en el medio tiempo. Los catalanes pusieron la directa desde el principio, como ya hicieran en el primer tiempo. Una descarga perfecta de Ferran Torres habilitó a Lewandowski y el polaco se topó con la solidez viguesa. Los gallegos contestaron al contragolpe, cuando Borja Iglesias encontró a Durán, quien partió a Iñigo Martínez y obligó a Szcesny a intervenir.
En el minuto 52, con un balón en largo, De Jong cometió un error mortal que Borja Iglesias aprovechó para poner el 1-2 en una definición perfecta. Los gallegos remontaron el partido y provocaron música de viento en Montjuic con una Liga que peligraba. Los azulgranas optaron por colocar muchos futbolistas por delante de la pelota, lo que provocó un escenario muy arriesgado.
Pedri sufrió una pérdida muy peligrosa ante Moriba, quien catapultó a Borja Iglesias. El ariete gallego tuvo el hat-trick, pero se topó con Szczesny. Flick se cansó e introdujo a Dani Olmo y Lamine Yamal por Ferran Torres y Fermín. Sin embargo, el Celta golpearía primero que cualquiera de los dos recién incorporados. El gallego tiró el desmarque a la espalda tras el pase de Carreira y superó a Szczesny con un disparo medido.
Gran reacción del Barça en el peor momentoCuando Montjuic era un cementerio,Dani Olmo contestó con el 2-3 tras una buena acción de Raphinha y metió el partido en una coctelera. Solo tres minutos después, en el minuto 67, Lamine Yamal puso un centro con música al interior del área y Raphinha remató con contundencia para hacer el empate. Los azulgranas eran un terremoto que arrasaban con todo y Olmo rozó el cuarto gol de la tarde, mientras Lewandowski se lesionó.
El polaco se lanzó al suelo en el minuto 77 en su partido número 100 de Liga con el Barça. Gavi entró en su lugar, colocándose como un delantero más. La lesión del ariete polaco debilitó al Barça, que perdió fuelle en los últimos minutos pese a acumular pases en la frontal del área. Atascado el equipo culé, el conjunto de Flick lo intentó a balón parado, aunque el remate de Gavi se marchó fuera.
No obstante, la mejor ocasión en los últimos minutos la tendría el Celta con un cabezazo muy claro de Mingueza a un metro de portería que se marchó por encima del larguero. Raphinha agredió a Aspas y solo vio la amarilla. Los gallegos pidieron un penalti residual por el golpe de Szczesny al jugador. Del Cerro Grande y Melero López no lo vieron. Sí que señalaron el penalti de Yoel Lago sobre Olmo. Del Cerro Grande llamó a Melero López y Raphinha convirtió la pena máxima en el minuto 97.