España cierra el año ante Suiza a lo mágico con las diabluras de los Bryan (Gil y Zaragoza)

11/18/2024 04:44 PM

España cierra el año con una victoria ante Suiza en un partido con tres penaltis. Dos para España. Uno lo falló Pedri y el del triunfo, en el descuento, lo marcó un gran Bryan Zaragoiza. En la fotografía sale Fabián, de nuevo, tras su error en Dinamarca. Es lo malo. El centrocampista del PSG cometió el fallo de levantar el pie en un balón llovido y dar una patada al delantero suizo. El árbitro señaló penalti. Zequiri batió a Robert Sánchez y el colofón, lo bueno, lo hizo Bryan Zaragoza procando el penalti y marcando.

El resultado reivindica el enorme talento que tienen nuestros futbolistas. Un encuentro que daba para pocas motivaciones lo convirtió en un desafío. Sin el grueso de los jugadores que ganaron la Eurocopa, sin muchos de los cambios de nivel y le dio para dar otra lección de competitividad. Esta vez le tocó el turno a jugadores como Yeremy Pino, Marc Casadó, Mingueza, Cubarsí, Bryan Gil, Bryan Zaragoza... Juegue quien juegue, plan A, B o C, es un equipo que mantiene la propuesta ofensiva y, lo más importante, tiene varios registros para someter y vencer a sus rivales. Hay que cuidar los fallos en defensa. Una asignatura pendiente para los años que vienen.

Los goles los marcaron Yeremy Pino, Bryan Gil y Bryan Zaragoza. Luis de la Fuente sumó más jugadores a su plan de presente y futuro, con la entrada en la segunda parte de Samu. España acaba el año metida entre las mejores del mundo y con la confianza que hay mucho talento al que se le puede sacar rendimiento.

Costó doblegar a Suiza. Tardó en llegar el primer gol. Costó por el flojo inicio del partido de la Selección, con menos energía y un ritmo bajo en el juego. Hasta que Morata recogió un balón en largo, se lo llevó dentro del área y provocó el penalti que cayó del lado de España. Primero por la caída de Morata, que recibe el contacto por detrás de Ricardo Rodríguez. Segundo porque no lo tiró el capitán y lo cedió a Pedri ante la petición popular de la afición. Tercero porque Pedri lo falló, con un paradón del portero, el rechace fue a caer a Nico Williams y su disparo tampoco vio portería. Lo último de este largo penalti fue que el balón cayó, de nuevo rechazado, a Yeremy Pino y de un derechazo acertó.

España consiguió romper a la media hora del partido el cerrojo de Suiza. Fue de menos a más hasta la jugada de este penalti que generosamente cedió Morata. El delantero había tenido un par de ocasiones antes de esta acción en la que no tuvo fortuna. En una le quitó el balón el defensa Cömert, anticipándose al remate. En la siguiente se plantó mano a mano con el portero y la envió al cuerpo. Estaba en fuera de juego.

Morata, que venía de ser suplente en Dinamarca por el protocolo de precaución del golpe en la cabeza que recibió en un entrenamiento con el Milan, no fue egoísta. Esto te lo puedes permitir en partidos en los que no hay nada en juego. Contra Suiza hubo algo de pereza. Pero Morata se jugaba en Tenerife sumar más goles en su cuenta personal e igualar o superar a Fernando Torres en el tercer puesto del ránking de goleadores históricos con la Selección. Morata (37) lleva uno menos que Torres. El capitán se quedó sin marcar.

De la primera parte, lo más destacable fue el largo penalti y el gesto de Morata. En cuanto al juego, el partido fue espeso. España le puso más voluntad que buen fútbol y, aunque no había nada en juego, de la Selección se esperaba más eficacia. Entre los motivos de esta razonable relajación está la revolución en el once de Luis de la Fuente.

Cambió hasta el portero. Jugó Remiro y también debutaron Mingueza y Aitor Paredes como titulares. A Marc Casadó le tocó hacer de mediocentro tras la baja del lesionado Zubimendi. El mediocentro del Barcelona empezó junto a Fabián y con Nico Williams y Yeremy Pino en las bandas. Al descanso se llegó con pocas ocasiones de gol, sin trabajo para Remiro, y la sensación de que España no pisó el acelerador lo suficiente como para darse un festín.

Debut de Samu

En el descanso salió Samu. Ahora Aghehowa y antes Omorodion. El joven delantero, hijo de inmigrantes que nació en Melilla y juega en el Oporto, ha pedido cambiar el apellido en honor a su madre. Es Samu Aghehowa. En Oporto se está hinchando a marcar goles y se une a Nico Williams y Lamine Yamal como hijos de emigrantes que buscaron un futuro mejor en nuestro país y sus hijos alcanzan la Selección absoluta. Dos de ellos (Nico y Lamine) son campeones de Europa. Al cambio de Samu se unió el de Robert Sánchez por Remiro.

La primera gran ocasión del segundo tiempo es un disparo cruzado y ajustado de Suiza tras un error de Paredes. España volvió a entrar fría y despistada al campo. De los más enchufados, el que no paró de correr y pedir la pelota es Marc Casadó. Debutó en Dinamarca y en su segundo partido demostró que tiene personalidad, vigor y mucho descaro. España va sobrada de mediocentros. Falta Rodri y luce Zubimendi. Casadó es otra alternativa para dar equilibrio, verticalidad y mucho trabajo.

El aviso de Suiza espabiló a España, con un juego más agresivo y desequilibrante volcado por la banda de Nico Williams. La Selección volvió a hacer un fútbol más fluido y amenazante. Pudo marcar el segundo gol en un remate de Fabián que paró el portero y otro de Nico Williams. El partido, de nuevo controlado, daba para más oportunidades y Luis de la Fuente decidió dar entrada a Bryan Gil por Nico Williams. El jugador del Athletic se marchó aplaudido por la afición. Nico convertido en poco tiempo en ídolo del fútbol español.

Los cambios sentaron mejor a Suiza. Empató a falta de media en una jugada que deja mal a Aitor Paredes. Monteiro agarró el balón, arrancó y se fue de Grimaldo. En el duelo con Paredes le superó en contundencia y potencia. Al central del Athletic le faltó determinación. Suiza igualó el partido y España no desesperó. Sacó el carácter en una jugada individual y de fe de Bryan Gil. El extremo del Girona erró un pase, persistió y fusiló al portero. Un gol merecido por su tenacidad, ganas y rebeldía. De la Fuente vio el momento para meter a Bryan Zaragoza, otro agitador como Bryan Gil, por Yeremy Pino. La España de los Bryan le metió una marcha más al ataque por las bandas. También va sobrada de buenos extremos.