Ni el VAR ni Pulido Santana ven el plantillazo a Bellerín y los árbitros opinan: "Al límite de la roja"
Ayer a las 01:52 PM
No llegamos ni al minuto 2:30 de partido cuando Bellerín sufrió una entrada −doble− de Bertug Yildirim. El jugador del Getafe cae al suelo y sus piernas dan en el defensor bético: una a la cadera y otra a la rodilla. La pierna de la rodilla se extiende para golpear, a priori con intencionalidad, a Bellerín, pero la jugada no fue de roja.
El árbitro no señaló nada, pero dio la impresión de que desde VAR se revisó la jugada −lo que quiere decir que en un momento sí se pudo ver una jugada que podría suponer la expulsión−. El colegiado, Juan Pulido Santana, se mantuvo firme en su solución y no vio intencionalidad en el golpe del azulón.
Otros árbitros expertos salieron a comentar la jugada en redes sociales. Uno de ellos es Uxío Caamaño −@MrAsubio−, exárbitro profesional. Para él la jugada está al límite de la roja. Señala que lo gris está en si hay intencionalidad por parte de Bertug Yildirim de hacer daño a Héctor Bellerín.
Minuto 3 de partido y no se le ocurre otra cosa a Bertuğ Yıldırım que raspar con sus tacos a Bellerín. El pie derecho en la cadera del bético y el izquierdo en la rodilla derecha.
AL LÍMITE DE LA
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:En directo no se enseñó... pic.twitter.com/g8k7DlZUXb
— Mr. Asubío (@MrAsubio) September 18, 2024
La roja no señalada por la entrada a Héctor Bellerín
Según Mr. Asubío, "Sí entiendo que el VAR no entre al no tener 100% seguro que sea adrede o que coincidiese la caída del azulón con sus pies en esa posición. Muy gris y jugó con mucho fuego. Dejar a tu equipo con 10 en el minuto 3 por esto... debería hacer reflexionar a muchos", explicó el experto.
Sí que parece que por la inercia de la caída la pierna del visitante va a esa zona peligrosa del jugador verdiblanco. Sin embargo, es el tiempo que pasa desde su caída hasta que golpea realmente a Bellerín lo que es susceptible de ser tarjeta roja.
El momento, que no tuvo ni amarilla, dejó otro momento curioso. Bordalás fue el primero en atender al lateral del equipo de Pellegrini al ver que se quejaba de la rodilla.
