Análisis temporada 2023/24 del Rayo Vallecano
07/05/2024 04:51 AM
El Rayo Vallecano no ha realizado una gran temporada. El equipo vallecano ha sufrido hasta el final, manteniendo la categoría en las últimas jornadas. Con ello, desde Unión Rayo vamos a analizar todo el trayecto de la Franja durante el curso 2023/24.
Una pretemporada aceptable
El Rayo Vallecano preparó el curso enfrentándose a varios equipos y viajando a Grecia, Inglaterra y Portugal. Primeramente, ganaron en el primer partido de pretemporada frente al Panathinaikos (0-1) gracias a un gol de Álvaro García. Seguidamente, empataron a unos frente al Charleroi, y en el siguiente volvieron a empatar contra el Oporto (1-1).
Ya en julio, el combinado madrileño jugó un partido lleno de goles frente al Real Valladolid, donde cayeron derrotados por 3-2. Los de Francisco no dieron una buena versión, dejando dudas. Para concluir la pretemporada, el Rayo empató a uno contra el Brighton. En conclusión, una victoria, tres empates y una derrota en la pretemporada.
Inicio bueno y un garro de agua fría
El conjunto de Vallecas arrancaba LaLiga con muchas ganas después de que en la anterior pelearan por entrar en Europa hasta la última fecha. Comenzaron bien, ganando plácidamente al Almería fuera de casa. Los goles de Isi y Nteka desde los once metros les dieron los tres primeros puntos en el estreno a los rayistas. Tras un gran debut, asaltaron el Estadio Municipal Nuevo Los Cármenes. Ganaron sin problema con las dianas de Álvaro García y Pathé Ciss.
Con los ánimos por las nubes y en una posición alta en la tabla liguera, recibieron un jarro de agua fría en su primer partido en casa en la tercera jornada, donde sufrieron una goleada histórica por parte del Atlético de Madrid (0-7). En la siguiente jornada, cayeron nuevamente frente al Real Betis en el Benito Villamarín en un partido muy disputado.
Buena racha sin perder
Después de dos derrotas seguidas, el Rayo se recompuso venciendo sin problemas al Alavés (2-0). Lograron volver a sumar tres puntos con los goles de Isi, de penalti, y de Jorge de Frutos. Una vez de vuelta a la senda de la victoria, el combinado de Francisco entró en una espiral de empates. Firmó tablas en los siguientes partidos ante Villarreal (1-1), Cádiz (0-0), Mallorca (2-2) y Sevilla (2-2), hasta lograr sumar, después de cuatro partidos seguidos empatando, los tres puntos contra la UD Las Palmas, que ganaron gracias a un gol ‘in extremis’ de Bebé.
Posteriormente a volver a ganar, la Franja volvió a registrar un empate sobre la bocina con un nuevo gol de Bebé en los instantes finales frente a la Real Sociedad (2-2). Ya en el siguiente mes, obtuvo el pase a dieciseisavos en la Copa del Rey tras vencer contundentemente al Atlético de Lugones (0-6).
Partidos duros
Durante las siguientes cuatro jornadas, al equipo de la Albufera le tocaba enfrentarse a los más grandes de la competición (Real Madrid y Barça) y una de las sorpresas (el Girona), además de un gran Athletic Club. Primeramente, obtendría un punto en el Santiago Bernabéu tras un buen partido de toda la plantilla, para después caer derrotados en su feudo ante el Girona, donde lucharon con todo.
Tras ambos duelos, lograron sumar un punto frente al Barça en un partido que comenzaron ganando con un gol de Unai López y que igualó Lejeune en propia meta. Los tres partidos acabaron con buenas sensaciones, aunque con el mal sabor de haber podido sumar algo más, lo que les hacía ir con mucha ambición a San Mamés. Sin embargo, se llevaron una dura goleada por 4-0, en uno de los peores partidos de la temporada hasta la fecha, por no decir el peor.
Resultados amargos
Ya en el mes de diciembre, arrancando con la dura derrota frente al Athletic Club, obtuvieron el billete para los dieciseisavos de final de la Copa del Rey. Lograron ganar al Yeclano Deportivo con goles de Falcao y Raúl de Tomás. De vuelta a la Liga, encadenaron tres partidos seguidos sin conseguir la victoria. Empataron contra el Celta de Vigo y perdieron frente a Osasuna y Valencia.
Arranque de año amargo
El año comenzaba de la mejor forma: ganando. Los de Francisco vencieron al Getafe con polémica gracias a un doblete de un gran Sergio Camello. Menos de una semana después, avanzaron a los octavos de final de la Copa del Rey tras vencer al Huesca con sufrimiento, llegando a la prórroga, aunque a poco más de una semana, caían en la competición copera frente al Girona.
Ya centrados al 100% en la Liga, perdieron en casa contra la UD Las Palmas en Vallecas. Después, empataron ante la Real Sociedad y el Atlético de Madrid, finalizando el mes de enero de una forma amarga y dando malas sensaciones.
Nueva cara en el banquillo
Adentrándonos en el mes de febrero, los resultados y las sensaciones no cambiaron y siguieron generando dudas, perdiendo contra el Sevilla (1-2) y el Mallorca (2-1), provocando así el cese de Francisco Rodríguez del banquillo rayista. Con la salida de Francisco, entró Íñigo Pérez, con la idea de devolver el estilo de Andoni al Rayo Vallecano. Su debut, tomando las riendas del equipo, fue nada más y nada menos que contra el Real Madrid, logrando empatar a uno en Vallecas.
A pesar del cambio de entrenador, el combinado madrileño siguió sin levantar cabeza, siendo goleado en Montilivi (3-0), empatando contra el Cádiz (1-1) y perdiendo contra el Alavés, hasta lograr la primera victoria de Íñigo en el banquillo frente al Real Betis, a quienes ganaron plácidamente por 2 goles a 0.
Espejismo de buenas sensaciones que acabaron con miedo
Tras lograr la primera victoria de Íñigo en los mandos del equipo, el Rayo obtuvo dos empates seguidos contra Celta y Getafe y una vital victoria contra Osasuna para alejarse de la zona roja de la tabla liguera. A la siguiente jornada, serían goleados por el Villarreal en un duro golpe.
Asimismo, perdieron ante los colistas, el Almería, que solamente había ganado un solo partido durante todo el curso, perdiendo una oportunidad buenísima para alejarse de una vez por todas del descenso, cosa que tampoco ocurriría en la siguiente jornada frente al Valencia, con quien firmaron tablas a cero en Mestalla.
Punto y final al sufrimiento
Con tres jornadas por delante y la posibilidad de descender, el Rayo lograría una importante victoria contra el Granada para dejar en bandeja la permanencia en Vallecas. En la penúltima jornada, contra el Barça, lograría sellar la permanencia a pesar de perder contundentemente gracias al empate del Cádiz frente a la UD Las Palmas. Ya en la última jornada, perdería por la mínima en el partido honorífico al centenario, con la afición haciendo un espectacular mosaico en todo el campo.
Así se puso punto final a una temporada muy amarga en comparación con la anterior, dejando muchas dudas y con las ganas y la ambición de hacer un mejor curso la próxima temporada, con nuevas caras e Íñigo desde el primer momento al mando.
